lunes, 7 de junio de 2010

De los sobrinos y sus características

El “sobrino” es una de las grandes plagas del siglo XXI, y ha despertado el interés de numerosos biólogos y eruditos de la zoología.

El sobrino es una especie única, con características propias que no comparte con ninguna otra especie. Como ya mencionamos, esta especie se ha convertido en una gran plaga, por lo que carece de un hábitat natural propio y se lo puede encontrar a lo largo y ancho del planeta.

Muchos estudiosos han comparado esta especie (el sobrino) con la especie canina (el perro). Si bien comparten varias características, se diferencian en muchas otras. Como por ejemplo: a) Que el sobrino de temprana edad es mucho más inquieto y molesto que el cachorro de perro (esto está comprobado empíricamente); b) Que el perro es más independiente en cuanto especie. Puede vivir en estado salvaje, sin ser domesticado, y sobrevivir por sus propios medios. El sobrino, en cambio, necesita ser domesticado. Pues, como veremos a continuación, en su edad más temprana no puede subsistir por sí solo.

El sobrino es una especie relativamente fácil de domesticar. El grado de facilidad depende de su edad. Nos vamos a concentrar aquí en la clasificación de los sobrinos y sus principales características. Para realizar esto, se debe aclarar que el estudio de esta especie está profundamente relacionado con sus dueños. Dicho esto, comenzamos la clasificación, la cual está desarrollada en base a la edad del sobrino:

1) En primera instancia encontramos al sobrino de cero a doce años de edad. Este es bastante difícil de domesticar, y la tarea requiere de mucha paciencia. Al sobrino de esta edad se lo debe alimentar hasta que el aprenda a hacerlo por sí mismo. Generalmente esta tarea tarda en completarse entre un año y un año y medio, aunque una vez transcurrido ese tiempo, se lo debe vigilar mientras se alimenta. Afortunadamente este proceso lo realiza mayormente otra especie muy estudiada, de la que ya se ha escrito mucho, por lo que no me adentraré en explicaciones sobre ella. Lo que hay que tener en cuenta es que si uno desea que el sobrino adquirido le sea fiel, debe participar e involucrarse en el proceso siempre que le sea posible.

Cuando el pequeño comienza a caminar por sus propios medios, es cuando se empieza a complicar el proceso de domesticación. Pues no hace más que pasearse por entre las piernas de la gente, provocando tropezones, por lo que terminan echándolo de todos lados.

El sobrino de cero a doce años depende mucho de la atención que se le dé. Generalmente se recomienda a aquellas personas que hayan adquirido uno de estos ejemplares, que jueguen periódicamente con él, y lo vigilen a toda hora. De lo contrario las consecuencias pueden ser nefastas. Se ha conocido un caso en Albania, donde un sobrino de cinco años fue dejado de lado, y tres meses después la casa de sus dueños fue incendiada hasta los cimientos, con todo y sus muebles. El ejemplar de cinco años pasó esos tres meses coleccionando fósforos a falta de una actividad más entretenida.

2) En segundo lugar encontramos al sobrino de doce a veintidós años, el cual presenta un caso bastante particular. Estudios han demostrado que es el más difícil de domesticar. Sin embargo se ha comprobado que es en esta instancia donde resulta diez veces menos peligroso para sus dueños (en relación al ya mencionado sobrino de cero a doce años). A la vez, se ha verificado que es diez veces más peligroso para el resto de la población. Los expertos dicen que es en esta etapa donde el sobrino afianza su relación con su dueño, y comienza su domesticación definitiva.

3) Por último, tenemos al sobrino de 22 años en adelante. Este ya está prácticamente domesticado, no requiere atención especial y se relaciona con sus dueños en perfecta armonía.

Los sobrinos son una de las pocas especies en las que la reproducción no depende de ellos, sino de esta otra especie, ya antes mencionada en el texto, que los empolla masivamente y los reparte por el mundo.

Los sobrinos son de venta libre (porque abundan) y se pueden conseguir en cualquier criadero del mundo a 40 pesos, o su equivalente en moneda extranjera. Se pueden adquirir machos o hembras. La principal diferencia entre los géneros se nota en la primera etapa (de cero a doce años), y consiste en que la hembra es apenas menos molesta y destructiva que el macho.

Me dediqué muchos años al estudio de los sobrinos, y puedo afirmar con toda certeza que son una hermosa especie, a pesar de su turbulenta primera etapa, para adquirir ejemplares de cero a doce años y tener en el hogar. Sobre todo si se tiene hijos y un jardín grande.

Soledad Salazar

No hay comentarios:

Publicar un comentario